sep 052012
 

Cristian Aguirre

El año pasado IBM anunció, mediante su representante Bruce Hillsberg, la construcción del dispositivo de almacenamiento más grande del mundo con la capacidad de albergar 120 petabytes, es decir, la capacidad equivalente a 120,000 de los actuales discos duros de 1 terabyte. En este contenedor gigante de datos se espera almacenar aproximadamente un trillón de archivos y datos, lo que permitirá guardar la información necesaria para simulaciones altamente complejas.

Esta unidad permite almacenar 24 mil millones de archivos MP3 de cinco megabytes cada uno o 60 copias de seguridad web (150 millones de páginas). Para permitir el funcionamiento continuo de este sistema de almacenamiento, los ingenieros de IBM han perfeccionado una serie de técnicas que incluyen unidades de refrigeración con circulación de agua a fin de permitir realizar su trabajo a casi su velocidad total.

Este asombroso avance de la tecnología actual, que sin duda será superado pronto, empalidece, sin embargo, con otra tecnología de almacenamiento mucho más eficaz y, sin embargo, también mucho más antigua.

A diferencia del dispositivo de IBM que requiere una enorme sala de gabinetes de discos duros y de un adecuado sistema de refrigeración con sistemas de respaldo y redundancia para la energía y el almacenamiento, esta tecnología permite almacenar los 120 petabytes en un dispositivo tan denso que solo pesaría 172 gramos, y con uno de 8 kilos se podría almacenar todas las páginas web de Internet hoy existentes en el mundo. Y esto sin requerir de alimentación eléctrica ni de temperaturas cercanas al cero absoluto tal como lo requieren los sistemas de holografía cuántica. Por último, a diferencia de los dispositivos magnéticos u ópticos que no duran más de un siglo, este dispositivo puede almacenar la información durante cientos de miles de años.

¿Quien es el inventor de este maravilloso, estable y eficiente sistema de almacenamiento de información? Continúe leyendo »

Download PDF